Resumen:
El presente trabajo es un escrito sustentado por las publicaciones históricas representativas y trabajos recientes donde se describa la geología, morfología e historia de la cuenca de México. Tiene como sustento el interés histórico por describir a la cuenca y sus valles, el conocer su geología y desde luego, su aprovechamiento económico.
Descripción:
La Cuenca de México es una depresión topográfica ubicada al centro de la Faja Volcánica Transmexicana (FVTM), un arco magmático de 1,000 [km] de longitud; se delimita por cadenas de distintos episodios volcánicos del Neógeno y es catalogada como una cuenca de intra-arco.
En el subsuelo, se encuentra una secuencia de calizas y dolomías con nódulos de pedernal, pertenecientes a la Formación Morelos del Albiano-Turoniano temprano y que conforman el basamento. Sobreyaciendo a esta, la Formación Mexcala, está representada por sucesiones interestratificadas de areniscas, limolitas y lutitas calcáreas, además de la presencia de escasas calizas clásticas, conglomerados de grano fino y estratos carbonosos del Cenomaniano-Maastrichtiano. Cubriendo discordantemente a las secuencias anteriores, se tiene una sucesión de depósitos continentales del Grupo Balsas que indican una clara influencia de intensa actividad volcánica durante el Eoceno tardío y el Oligoceno temprano.
Tras los grandes episodios magmáticos del Neógeno, la secuencia culmina con la acumulación de aproximadamente 400 [m] de depósitos de arrastre, producto de la erosión de las rocas volcánicas de las secuencias que bordean y están dentro de la cuenca. Se tienen depósitos aluviales y lacustres de variada granulometría, además de intercalaciones de rocas volcánicas, como andesita y ceniza.
La cuenca conforma sus límites geológicos a partir de los grandes pulsos magmáticos del Neógeno, que se desarrollan a partir de varios sistemas de fallas normales y que conforman un sistema de horst y graben. Hace 1.2 [Ma] la Cuenca de México se ve consolidada tras los primeros pulsos magmáticos de la Secuencia Chichinautzin que bloquean el desagüe de los ríos que fluían hacia el estado de Morelos y que cierran a la cuenca para darle la morfología que conocemos hoy en día, convirtiéndose en una cuenca endorreica, que en su momento generaba escurrimientos formando un gran lago en su interior.