Resumen:
La demanda de energía en el mundo crece día con día debido al desarrollo de cada una de las naciones, los hidrocarburos son la principal fuente de energía actualmente que existe en el planeta, y se cree que para el año 2030 representarán el 83% de las fuentes de energía. Sin embargo, la producción de hidrocarburos ha llegado a una etapa de declinación debido principalmente a que el petróleo de fácil extracción ha disminuido sustancialmente. Debido a ello surge la necesidad de evaluar opciones diferentes a la recuperación de hidrocarburos no convencionales.
Los hidrocarburos no convencionales son una excelente alternativa para compensar la disminución actual y futura de la producción; que significa la declinación de varios de los principales campos petroleros del mundo. Los hidrocarburos no convencionales son aquellos que solo pueden ser recuperados con índices de productividad comerciales, mediante el cambio de la permeabilidad de la roca o de la viscosidad del fluido. El potencial de este tipo de hidrocarburos es muy llamativo ya que cuentan con gran cantidad de recursos prospectivos distribuidos en todo el mundo, desafortunadamente, por su dificultad de recuperación su producción resulta ser muy cara o en ocasiones no factible. Actualmente existen técnicas para la exploración y explotación de los hidrocarburos no convencionales; todas ellas varían de acuerdo a las condiciones dadas por el yacimiento o por el tipo de fluido.
Las energías no convencionales son una fuente de energía limpia que representa otra opción para la demanda de energía; este tipo de recursos son muy diversos ya que provienen de la naturaleza, esto otorga la ventaja de que pueden ser aprovechados en diferentes tipos de regiones. Además son apoyadas por los gobiernos mundiales con el fin de mejorar el medio ambiente y tener un desarrollo sustentable.