Resumen:
Los yacimientos no convencionales han cobrado mayor interés recientemente debido a que la principal fuente energética a nivel mundial siguen siendo los hidrocarburos y varios de los yacimientos convencionales ya han sido explotados, así que es necesario continuar la exploración en los no convencionales para poder suplir la creciente demanda energética para continuar con la calidad de vida de la actualidad. Para este propósito, los registros geofísicos de pozo y los atributos sísmicos, son de gran utilidad para caracterizar los yacimientos y tomar decisiones en la perforación de los mismos.
En este trabajo se estudió el comportamiento de la onda compresional en un yacimiento no convencional por medio de los atributos sísmicos amplitud, fase, frecuencia, factor de calidad, descomposición espectral, así como de la observación del cambio de polaridad de la onda sísmica en el medio. Para este fin se estimaron las profundidades de interés y algunas características petrofísicas como la saturación de agua y la composición litológica a partir de la interpretación de registros geofísicos de pozo tales como resistividad somera, resistividad profunda, rayos gamma y neutrón. Para poder relacionar los datos de pozo con los sísmicos, se aplicó una aproximación matemática de conversión. Teniendo este sustento de base, se picaron y generaron los respectivos horizontes en las secciones sísmicas, a lo largo de los cuales se presentan impregnaciones de hidrocarburos. Evaluando los atributos ya mencionados sobre los horizontes, pudimos corroborar que los atributos aplicados en los yacimientos no convencionales muestran un comportamiento similar a los convencionales, sin embargo se constató que funciona mejor la descomposición espectral para encontrar las zonas de sintonía del medio con mayor probabilidad de tener hidrocarburos.
No obstante como plantea Arthur E. Barnes (2007) se corroboró que es necesario utilizar más de un atributo concluir sobre la distribución de hidrocarburos en cualquier horizonte. Finalmente se pudo observar que las zonas con una amplitud alta no siempre correspondían con frecuencias altas, presentando factor de calidad cercano a cero, siendo así medios atenuantes de energía sísmica en toda su extensión. Las áreas de sintonía en su mayoría se encontraron en las bandas de 10 a 20 Hz y de 20 a 30 Hz. Una característica importante de este trabajo es que las áreas en sintonía siempre tocaron al pozo A que en este trabajo lo asociamos con presencia de aceite.