Resumen:
Los desechos industriales afectan de muchas y muy diferentes formas, la vida normal de las fuentes acuíferas. Cuando estos efectos son lo suficientemente grandes como para considerar que esta fuente es aceptable para ser “usada”, se dice que está contaminada. Entre los diferentes usos del agua están los de escala doméstica (bebida, riesgo, etc.) los naturales (base para la vida de la flora y la fauna acuáticas), los recreativos (natación, remo, etc.), amén del uso industrial. Las fuentes acuíferas pueden asimilar una cierta cantidad de desechos antes de llegar al llamado “estado contaminado”. Por tanto, para decir que un acuífero (manantial, río, lago, etc.) está contaminado, éste debe tener un exceso de agentes contaminantes, esto es, que los ciclos naturales no puedan restablecer el equilibrio.