Resumen:
Las estructuras de concreto reforzado tienen ciertas características, derivadas de los procedimientos constructivos usados en su fabricación, que la distinguen de las estructuras de otros materiales. El concreto se fabrica en estado plástico, lo que obliga a utilizar moldes para soportarlo mientras adquiere una resistencia suficiente para que la estructura sea autosoportante. Esta característica implica ciertas restricciones, pero al mismo tiempo porta algunas ventajas. Unas de éstas es su “moldeabilidad” propiedad que brinda al proyectista una gran libertad en la elección de formas. Gracias a ello es posible construir estructuras, como los cascarones que en otro material serían muy difíciles de obtener.