Fallas activas durante el sismo del 19/09/2017 en Zacatepec, Morelos

Abstract

El 19 de septiembre del 2017 a las 13:14 horas tuvo lugar en el centro de México un fuerte sismo que ocasionó grandes daños y pérdidas. Este fenómeno registró una magnitud de 7.1 con epicentro en el límite entre los estados de Puebla y Morelos, 12 km al sureste de Axochiapan. Posterior a este evento sísmico, se documentaron réplicas de sismos someros sobre la zona comprendida entre el sur de la CDMX y Jojutla, Morelos. Dentro de esta zona, uno de los lugares con mayor afectación fue la colonia Lázaro Cárdenas en el municipio de Zacatepec, Morelos, donde varias edificaciones colapsaron y otras más tuvieron importantes daños estructurales, entre ellas un hospital del IMSS y tres escuelas. Las construcciones afectadas se encuentran alineadas a lo largo de 800 m aproximadamente. El suelo presenta un intenso agrietamiento con una orientación N-S. La colonia Lázaro Cárdenas se encuentra asentada en una topografía relativamente plana y muy cercana al río Apatlaco, por lo que se infiere que el agrietamiento esté ligado a un deslizamiento de masas por asentamiento del relleno fluvial y antropogénico. Sin embargo, se analizaron dos secciones de tomografía eléctrica perpendiculares a la grieta con alcances de hasta 80 metros de profundidad, en las cuales se observan anomalías que definen estratos subhorizontales con distinta conductividad, los cuales se ven claramente interrumpidos justo debajo de la zona agrietada en superficie. La conductividad medida en este caso parece corresponder con la presencia de agua en los estratos del subsuelo, los cuales parecen corresponder a una capa impermeable y poco resistiva por debajo del río Apatlaco y a capas más conductivas, posiblemente de arenas y conglomerados de la formación Cuernavaca y depósitos aluviales. En cualquier caso, es claro que las grietas formadas en Zacatepec no son superficiales. Para entender estas grietas a mayor escala, se utilizó interferometría de radar, en la cual se comparan señales satelitales de radar antes y después del sismo para poder documentar desplazamientos verticales del suelo posiblemente generados por el sismo. En dicho interferograma se pudo ver que hubo subsidencia sobre una zona orientada N-S cerca de la zona afectada. Además de las fallas de Zacatepec, en la zona arqueológica de Xochicalco se formaron grietas con orientación N-S durante el mismo evento sísmico, lo cual sugiere que ocurrió extensión a una escala mayor que el municipio de Zacatepec. Dicha extensión coincide con la misma que dio lugar a conos cineríticos alineados N-S y que se distribuyen desde el norte la ciudad de Cuernavaca hasta el poblado de Tilzapotla; con edades que van de 1Ma a 80Ka. Esto sugiere que las pequeñas grietas que se abrieron son una manifestación de un fenómeno mayor que inició en el Pleistoceno.