Resumen:
UN PLANETA QUE COMPARTIR
En un rincón del universo, girando alrededor de un diminuto sol se encuentra el planeta más importante, el planeta Tierra, nuestro planeta. Hasta donde sabemos, en este lugar y sólo en este lugar se ha dado el milagro de la vida.
Infinidad de formas distintas de vida han aprendido a convivir durante millones y millones de años, dependiendo y necesitando unas de otras. En este proceso se formó un maravilloso tejido del cual el hombre es sólo una parte.
Desgraciadamente las actividades humanas están destruyendo este tejido. La tala de bosques enteros, la contaminación, la basura, el uso incontrolado de sustancias químicas, la sobrepoblación, etcétera, están poniendo en peligro la vida misma sobre el planeta.
Las actividades que están destruyendo el planeta las estamos realizando TÚ Y YO. Si no lo entendemos así, si no trabajamos cada uno de nosotros en cambiar de actitud, será muy difícil mirar a nuestros hijos a los ojos en el futuro y explicarles que cuando aún era tiempo, no luchamos para que su mundo también fuera bello.
La agricultura orgánica propone una forma de cultivar sin usar agroquímicos, sin forzar artificialmente los ciclos, es decir, producir alimentos sanos sin contaminar la tierra, ni el agua ni nuestros cuerpos. Plantea un método para trabajar con la tierra en vez de trabajar en contra de ella.