Resumen:
La ciudadanía, en tanto espacio no reclamado por la propiedad privada, nos hace entender el concepto de ciudadano: personas que tienen derecho a participar en deliberaciones para resolver los asuntos públicos. El concepto sociológico de ciudadanía proviene de T.H. Marshall, quien sostuvo que la ciudadanía es un status que provee a los individuos de una comunidad de derechos en tres ámbitos: civil, político y social. El primero se refiere a la libertad individual (palabra, pensamiento, propiedad, fe, posibilidades, etc). Los derechos en el ámbito político involucran el derecho a participar en el ejercicio del poder político, como miembro y como elector. Los derechos sociales remiten a un criterio de bienestar económico y seguridad, a tomar parte de la herencia social, de acuerdo a estándares reconocidos en la sociedad.