Resumen:
En todo escrito técnico se debe tomar en cuenta fundamentalmente el objetivo que se proyecta alcanzar, es decir, se debe enfocar su atención hacia las necesidades que va a satisfacer.
Hay varios tipos de escritos técnicos: EL BOLETÍN, el MEMORÁNDUM, el INFORME o REPORTE TÉCNICO y el ESTUDIO. Cada uno de ellos tiene una función específica.
En la organización de su trabajo, el redactor de informes técnicos analizará el probable texto del mismo, así como las ilustraciones necesarias que vendrán a darle claridad, además, determinará la forma general o estructura funcional que imprimirá a su trabajo. Esta estructura permitirá al escritor contestar desde el principio las diferentes preguntas que se hará el lector, a medida que avanza en la lectura del trabajo.
Los requisitos que debe cumplir un buen informe técnico son: presentación de todo el material pertinente, arreglo del material base de acuerdo con un orden determinado, claridad en todos los puntos que intervienen en el informe para evitar confusiones, la escritura deberá hacerse con lenguaje sencillo y estilo conciso, que no permita la posibilidad de malas interpretaciones y el escrito debe ser intangible para todos aquellos a quienes va dirigido, inclusive para quienes no estén especialmente versados en detalles técnicos.