Resumen:
Uno de los instrumentos más valiosos a la vez que más complejos de aplicar y desde luego que incluir dentro del bagaje cultural de los mexicanos, ha sido la Evaluación del Impacto Ambiental, que en sus líneas generales supone prever, en la etapa de la planeación, la inconveniencia, desde una óptica ambiental, de desarrollar proyectos productivos y sociales que pongan en riesgo el agotamiento de los recursos naturales, impliquen el deterioro de los elementos del medio con sus residuos, desplace y destruya espacios ecológicamente estratégicos y en consecuencia, signifique una amenaza para la salud humana.
En este marco, la evaluación del impacto ambiental desarrolla acciones para identificar, analizar y evaluar los efectos sobre la salud humana y del ambiente, de cuyos resultados se desprende la realización del proyecto o su potencial modificación. También implica la implantación de medidas de atenuación o mitigación ambiental, según sea el caso. De otro modo, puede tener lugar el rechazo inobjetable de un proyecto por ser incompatible con el medio, la salud humana y/o el aprovechamiento racional de los recursos naturales. El producto final es un documento oficio denominado Dictamen de Impacto Ambiental que establecerá la decisión adoptada por la autoridad y las condiciones que habrán de cumplirse.
